Los destinos más románticos del mundo

Tanto si sales un fin de semana a hacer un viaje por carretera como si te vas a la otra punta del mundo, hay muchos lugares imperdibles ideales para enamorados. Pero ¿qué hace que un lugar sea romántico? Una naturaleza espectacular, una historia rica y unas magníficas puestas de sol parecen estar en lo más alto de la lista. Sea cual sea el tipo de viaje que buscas, seguro que encuentras algo que te apetezca en nuestra lista de los destinos más románticos del mundo.

También conocido como Carmel-by-the-Sea, este pequeño y poético lugar ha sido el hogar de un buen número de artistas desde principios del siglo XX. Echando un vistazo a su inspirador paisaje, es fácil ver por qué; olas brillantes que bañan las arenas de color blanco marfil, árboles nudosos que se alinean en la costa y enclaves boscosos que cubren la bahía. En Carmel mismo, encontrarás cabañas con techo de paja, así como pequeñas panaderías, cafés y salones de té, todos con toldos a rayas y cestas de flores colgantes. Alójate en el lujoso Carmel Country Inn, donde puedes pasarte la noche bañándote y despertarte con las vistas de los jardines en flor.

Por su bonita ubicación a lo largo de la ruta peatonal conocida como la Rota Romântica, podrías pensar que has ido a parar a los Alpes cuando te adentres por primera vez en Gramado. Conocido por sus casas con entramado de madera y chocolaterías gourmet, Gramado tiene fuertes influencias alemanas, italianas y portuguesas. Los alrededores son famosos por su impresionante paisaje y la ciudad en sí es un pintoresco lugar de descanso destinado a despertar el romanticismo. El mejor momento para visitarlo es a finales de primavera, cuando las hortensias de color azul lavanda florecen alrededor del lago Negro. El Hotel Laghetto Pedras Altas no está lejos del lago y sus lujosas instalaciones de spa brindan el tipo de relajación necesaria después de un día explorando.

Una lista de los lugares más románticos del mundo no sería nada si no incluyera la propia Ciudad del Amor. Desde subir a la Torre Eiffel hasta hacer un crucero por el Sena, hay actividades más que suficientes para mantener ocupadas a las parejas enamoradas. Son los momentos más tranquilos en París, cuando te acurrucas alrededor de velas parpadeantes en un café con poca luz, lo que lo hace tan maravillosamente romántico. Pasea por las galerías cubiertas, como las del Passage des Panoramas, iluminadas por lámparas de gas, para disfrutar de la verdadera magia del viejo mundo. Montmartre es un favorito absoluto entre los flaneurs enamorados, pero también puedes ir a los viñedos cercanos para un tête-à-tête sin interrupciones. En París no quedan muchos sitios así: filas y filas de vides suben por la empinada colina. Disfruta de un clásico del cine en Le Louxor antes de dirigirte a Artist Room Montmartre para pasar la noche.

Murano se sitúa en la laguna de Venecia y se ha hecho un nombre como destino de escapada para espíritus románticos que quieren alejarse de las multitudes. En su día Murano fue la capital mundial del vidrio, por eso vale la pena ver una de las muchas demostraciones de soplado de vidrio disponibles y llevarte a casa un regalo especial para ti o para un ser querido. Muy lejos de las vías fluviales saturadas de turistas de Venecia, los canales de Murano serpentean a lo largo de coloridas casas que tienen un estilo industrial y agreste. Despiértate temprano para dar un paseo por los puentes vacíos antes de subirte a un vaporetto y deslizarte por las aguas que circundan la isla. Duerme bajo vigas antiguas con vistas a la ciudad desde lo alto en el ático de Murano Suites.

Pokolbin se encuentra en los viñedos de Hunter Valley y es uno de los lugares más pintorescos de la región vinícola australiana. Pokolbin resulta ideal para quienes buscan combinar un poco de romanticismo con comida y vino de primera clase, ya que sobresale en la variedad que ofrece. A poca distancia en coche de Pokolbin, encontrarás la bodega boutique Tallavera Grove, donde podrás disfrutar de algunas de las mejores botellas de Hunter Valley. Toma algo mientras descansas en la frondosa terraza con vistas a las onduladas colinas bañadas por el sol. Después de saciar tu apetito en Muse Kitchen, puedes terminar la velada disfrutando de una copa de vino y de las vistas a los campos anaranjados al atardecer en Château Elan.

En el siglo XVIII, la ley inglesa decretó que las parejas menores de 21 años no podían casarse sin el consentimiento de sus padres. Por lo tanto, algunas parejas huyeron al norte, a Escocia, donde las normas eran un poco más relajadas, para casarse. Gretna Green es el primer pueblo al otro lado de la frontera, lo que lo convirtió en un lugar privilegiado para celebrar bodas, y su encanto ha resistido al paso del tiempo. Paseando por el pueblo te encontrarás con la famosa herrería de Gretna Green, adonde muchas parejas jóvenes se fugaron en el pasado y en la que todavía se casan en la actualidad. El invierno es especialmente romántico en Gretna Green, cuando todo queda espolvoreado de nieve y las muchas ventanas del pueblo emanan una suave luz. En una de las camas con dosel de The Mill Forge dormirás plácidamente.

Nada evoca tanto el romanticismo como la música compuesta en el lenguaje del amor. Sumérgete en esta lista de reproducción de baladas y chansons d'amour con clásicos como “Que je t'aime”, de Edith Piaf y Johnny Hallyday.