Casas rurales en Àger

Nos gustó todo, el lugar fantástico, los dueños maravillosos, tanto la cena cómo el desayuno muy buenos. Muy recomendable si buscas un lugar tranquilo para desconectar de todo. Deseamos volver pronto.

La tranquilidad del pueblo.

Se dormía maravillosamente

Estancia de 4 familias en Casa Moliner. El alojamiento muy limpio y cuidado. Las habitaciones grandes y todas con su baño propio. Los espacios bien decorados, equipados y funcionales. Se trata de una casa de pueblo, por lo que no dispone de zonas de juego exterior, a excepción de la terraza de entrada y la zona de piscina, que queda al cruzar la calle.

La casa es una pasada, todo limpio, nos encantó todo, la paz del pueblo y Susana una gran anfitriona!

Pasamos el puente de todos los santos y estuvimos muy bien. La casa tiene muchas escaleras, pero es cómoda. Las habitaciones son confortables y todas cuentan con baño salvo una. El espacio de la cocina es muy acogedor, con dos sofás y un gran ventanal que da a una terraza amplia y soleada, que además cuenta con un toldo eléctrico. Está equipada con material de cocina más que suficiente para hacer la comida a muchas personas. También cuenta con cafetera eléctrica de cápsulas. La televisión está situada en el distribuidor de la primera planta y es poco acogedora. Quizá deberían de poner otra en la cocina-comedor, aunque para mí fue un acierto no tenerla. Lo que de verdad le da un punto extra a la casa con respecto a otras es su zona de juegos, está situada en el sótano y es muy grande, el único pero serían los palos de billar, que deberían ser un poco más cortos, o al menos que hubiera uno un poco más corto, porque hay zonas en las que no puedes tirar porque te das con la pared. No hemos probado la calefacción, pues no hacía frío y no fue necesaria ponerla. Nos dieron facilidades en el check in y el check out. También nos informó sobre visitas turísticas, y cosas que ver y hacer por allí. Además tienes a 10 minutos en coche las instalaciones de Josep hemos Pamies y la dulce revolución que es visita obligada. El pueblo es muy tranquilo y cuenta con un bar, una tienda y una carnicería. Recomendaría sin duda la casa, especialmente si vas con niños. Nosotros estuvimos muy agusto.

La casa en general

La casa es grande, mucho espacio para estar todos cómodos, 3 lavabos que hacen que no coincidamos a la vez. La zona es muy tranquila y se aparca perfectamente.

Ramon super amable lo que hace muy fácil todo. la casa es amplia, las camas muy cómodas, la cocina bien equipada. Todo muy bien.